Read Historia de la mujer convertida en mono Online
Authors: Junichirô Tanizaki
Tags: #Cuento, Drama, Fantástico, Intriga, Terror
Lo que sucedió después ha sido divulgado lo suficiente como para tener que contarlo de nuevo aquí. A pesar de que sí había la posibilidad de que me pagaran un dinero, igual no pude conseguir los ciento cincuenta yenes que aguardaba. Pero eso no fue lo peor: vendí el cuadro a otra persona, ignorando el contrato firmado con K. Tenía la plena confianza de que K no haría público ese documento.
De esto me enteré luego, pues K estaba en su quinta de Hakone el día que clausuraron la exposición. Aprovechando el viaje de K, el sirviente de la casa, que me odiaba desde siempre, fue hasta la galería con la maliciosa intención de recoger el cuadro, alegando el pretexto de que cumplía la misión encargada por su amo. Estoy seguro de que fue el mismo sirviente quien me denunció a las autoridades.
¿Acaso todavía puede alguien afirmar que no soy un criminal? ¿Acaso soy “inocente e ingenuo”, como dicen algunos? Ya hasta perdí las ganas de arrepentirme. Me permito hacer aquí una confesión del todo sincera, dirigida no sólo a K sino al mundo entero: “Soy un criminal y carezco por completo de honestidad. Que me desprecien, detesten o alejen por esa razón, a mí no me importa. No me respeten ni simpaticen conmigo, eso no tiene ninguna relevancia. Pero, por favor, aprecien correctamente mi arte. No vacilen en aceptar que puede haber creatividad capaz de producir belleza aun en un alma tan degenerada como la mía. Sepan que la verdadera esencia de mi alma consiste en la creación artística. En comparación con la vida eterna de que goza el arte, mi alma criminal apenas perdurará mientras este cuerpo mío se mantenga con vida”.
JUNICHIRÔ TANIZAKI (Tokio, 1886-Yugawara, 1965). Novelista y ensayista japonés. Fue colaborador de la revista
Literatura de Mita
, junto con Nagai Kafu, Satô Haruo y Kubota Mantaro, jóvenes escritores que, como él, rechazaban la escritura naturalista del grupo
Shirakaba
. Influido por Edgar Allan Poe, Oscar Wilde y el simbolismo francés, publicó su primer cuento,
El tatuador
(1910). Con
Hay quien prefiere las ortigas
(1929),
Relato de un ciego
(1931) e
Historia de Shunkin
(1933), su estilo se acerca en mayor medida al realismo y a la cultura nipona clásica. De su obra posterior, fruto de la confrontación de lo tradicional y lo moderno en Japón, junto a cierta obsesión por lo erótico y sensual, cabe citar
Las hermanas Makioka
(1947),
La llave
(1956) y
Diario de un viejo loco
(1962). En el importante ensayo
El elogio de la sombra
(1933), efectúa un repaso crítico de las principales nociones estéticas de la cultura japonesa.